Muchas personas se preguntan cómo superar la adicción al Xanax. No es de extrañar, porque este problema afecta a muchas personas, independientemente de su edad, género o condición social. Afortunadamente, es posible superar el problema. Sin embargo, esto requerirá mucha paciencia y abnegación por parte del adicto. Incluso puede llevar años superar el problema. Cuanto antes se inicie el tratamiento, mayor será la probabilidad de una recuperación rápida.

¿Qué es Xanax?

Xanax es uno de los sedantes más populares. Pertenece a un grupo de medicamentos llamados benzodiazepinas. Podemos obtener una receta de Xanax de un psiquiatra, pero también de un internista o médico de familia. Casi cualquier médico puede prescribirlo. No es de extrañar que el uso de estos medicamentos sea tan común. Xanax y otras benzodiazepinas son utilizadas con mayor frecuencia por personas que luchan con trastornos de ansiedad graves. A menudo, estos medicamentos también los toman personas que luchan contra los trastornos del sueño. Esto se trata principalmente de problemas para conciliar el sueño. Xanax también se trata como un remedio para los ataques de pánico. El efecto terapéutico del medicamento generalmente lo siente el paciente quince minutos después de tomarlo. Desafortunadamente, estas drogas tienen un potencial adictivo muy fuerte. Por lo tanto, generalmente no se recomienda usar Xanax durante más de un mes. El riesgo de adicción aumenta cada día que consume Xanax. Aumentar la dosis también es un factor muy importante que aumenta la probabilidad de adicción. Si queremos evitar la adicción seguir siempre las indicaciones del fabricante y del médico que nos recetó el medicamento. Si sospechamos adicción al Xanax, debemos acudir rápidamente a un médico con experiencia en el tratamiento de adicciones.

¿Cuáles son los síntomas de la adicción a las benzodiazepinas?

Los síntomas de la adicción suelen ser muy específicos. Si tomamos Xanax todos los días durante varias semanas o varios meses, el riesgo de adicción es muy alto. Un síntoma muy grave de la adicción es la creciente tolerancia al principio activo. Entonces, si nos vemos obligados a tomar dosis cada vez más altas para sentirnos mejor, la probabilidad de adicción es alta. Prolongar el tratamiento sin consultar al médico por su duración también es síntoma de adicción. Pero, este no es el final. El hecho de que tengamos un problema también puede ser irritante si no tenemos acceso al medicamento. Si constantemente pensamos solo en cómo obtener la droga y solo nos calmamos cuando tenemos la receta en la mano, es posible que también estemos lidiando con una adicción. Un síntoma característico de la adicción es también la aparición del llamado síndrome de abstinencia. Desafortunadamente, puede causar síntomas muy desagradables. El más característico es el miedo fuerte, el pánico, así como los temblores de manos y piernas. El llanto y la depresión también son muy comunes. Estos síntomas desaparecen solo después de tomar una dosis muy grande de Xanax. Sin embargo, no debes hacer esto. Si tiene un problema de adicción, debe buscar inmediatamente la ayuda de un médico experimentado, preferiblemente un psiquiatra.

¿Cuál es el tratamiento de la adicción a las benzodiazepinas?

Si queremos recuperarnos de la adicción al Xanax, debemos admitir que tenemos un problema. Para muchas personas, esta es una de las etapas más difíciles del tratamiento. Entonces deberías considerar ver a un especialista. La mejor solución parece ser una visita a un psiquiatra experimentado. Ver a un psiquiatra puede ayudar a resolver el problema. La adicción a Xanax muy a menudo ocurre simultáneamente con trastornos de ansiedad o depresión. Afortunadamente, es posible combatir con éxito cada uno de estos problemas. Si la adicción a Xanax es grave, puede ser necesaria la desintoxicación en el hospital. Durante la desintoxicación, en condiciones controladas, experimentaremos desagradables síntomas de abstinencia. Sin embargo, después de la desintoxicación, debería estar mejorando. La psicoterapia será necesaria. La mejor solución puede ser ponerse en contacto con un psicoterapeuta de adicciones. Vale la pena buscar uno en la ciudad donde vivimos. La mejor solución será revisar las opiniones de especialistas individuales. Cuanto mayor sea el número de positivos, mayor será la probabilidad de que podamos hacer una elección satisfactoria. La psicoeducación también puede ser necesaria. Gracias a ella, sin duda, aprenderemos a evitar el problema de la adicción de nuevo en el futuro. El apoyo de sus seres queridos, incluidos familiares y amigos, también será útil.